viernes, 10 de julio de 2009

Se aceptan comentarios





Continuación...


Si quieren lo grito: ¡abajo los esquemas!, ¡arriba la izquierda que es capaz de pensar afuera de la cajita!
En otras palabras, estoy recontra curado de las simplificaciones, de la división del mundo en buenos y malos, del pensamiento en blanco y negro. Arrepentido, si quieren.
Ahora pregunto: ¿están los blancos curados de las prácticas políticas que los llevaron a manchar su reputación? ¿Han cambiado los criterios que usaban para elegir a los directores de las empresas públicas o los mandos intermedios del Estado?
Lo que todo Uruguay sabe no se arregla pidiendo “no debatir sobre el pasado y hacerlo sólo sobre el futuro”. En el futuro todos somos la Madre Teresa.
Es cínico pedirle a una sociedad que disimule saber lo que sabe. Que es lo mismo que apareció en todos los diarios en su momento y lo mismo que se dijo en radio Sarandí hace tres semanas.
De esto no se sale con silencio.
Se sale aceptando los errores y explicando por qué no se van a volver a cometer. Especialmente, comprometiéndose a abandonar la costumbre de pagar con cargos en la administración los votos que arriman los operadores.
Por ese camino, más de un atorrante terminó sentado en sillones con poder y presupuesto, aunque no supiera nada de la tarea y aunque fuera ligerito de manos.
El caso del presidente del Banco de Seguros durante la administración Lacalle, cuyos delitos tanto salpicaron al gobierno, me parece un ejemplo perfecto. ¿Por qué se lo nombró presidente del Banco de Seguros sin tener ningún antecedente de bancos, de seguros, de gerente ni de nada, excepto acarrear votos? Porque tenía una lista propia que en el 89 marcó 7.914 votos. Con eso, menos del 2% de los votos que sacó Lacalle, le alcanzó para cobrar su contribución con el cargo. Cuando Lacalle envió al Senado el pedido de venia para nombrar a este señor, en el currículum adjunto figuraban méritos como haber sido miembro de la Comisión Municipal de Fiestas y funcionario de la Corte Electoral. Es decir que fue nombrado con perfecta conciencia de su incapacidad para la función.
¿Saben a quién designó el gobierno del Frente en ese mismo cargo? A un gerente del banco con más de 20 años de experiencia y que nunca en su vida consiguió un voto.
Pagar con cargos ha sido un mecanismo repetido hasta el infinito por blancos y colorados. La lógica era: cuántos votos arrimás, tanto sillón conseguís.
Por ese camino discurrió durante décadas la corrupción y la desidia en el manejo de la cosa pública. Alimentar las maquinarias partidarias condicionó a todos los gobiernos blancos y colorados. No sólo a Lacalle, también a Sanguinetti y a Jorge Batlle. Todavía recuerdo a este último, siendo presidente, decir que no le gustaban muchos de los directores de empresas públicas que él mismo había nombrado.
Y si no te gustaban, ¿por qué los nombraste Jorgito?
Porque había que pagar deudas políticas.
Y ese era Batlle, de cuya honradez nadie duda.
La decencia y la vocación de servicio son cosas demasiado importantes para sacarlas de la discusión. Podemos discutirlas por “todo lo alto”, como dicen los blancos, pero no se pueden silenciar. Si el tema les duele, de acá a octubre hay tiempo de sobra para reconocer los errores y comprometerse a no repetirlos.
Yo he hecho mi sincera autocrítica y pretendo que se me crea.
Estoy completamente dispuesto a creer la de los blancos, cuando la hagan.





3 comentarios:

  1. La decencia es un problema polìtico? NOOOOOO!!!!! es un problema ETICO.- El que se fume lo que aparece en esa pàgina "El pepe tal cual es" , realmente es un nabo.- Basta con escucharlo hablar para darse cuenta que debe tener un "noqui" acomodado para que le escriba lo que èl realmente no piensa,no opina, no conoce, y no va a decir nunca en su vida.- Y de paso, porquè no cuenta el "Pepe" què acordò de la reuniòn con el Borda?.- Seguro que anulaciòn de la ley de caducidad no vamos a tener...... Piensen ,uruguayos, piensen !!!!! (Gracias, muerto, por dejarnos decir lo que pensamos)

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  2. O sea, interpretando al Pepe, ser decente es polìticamente incorrecto....

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  3. Lo primero que llama la atención es que este artículo no tiene autor.

    Lo publicado comienza con la copia de una página que parece ser del inefable traidor Mujica.
    Hasta aquí todo bien: podríamos abocarnos una vez más a sacarle la careta la “Pingüino” de Batman. Pero ello se trunca por el, algo incoherente, comentario que se observa a continuación del dislate.
    Aparentemente es uno de los intentos de “cómo te digo una cosa te digo la otra”.
    Se recuerda al pueblo de que los blancos robaron (chocolate por la noticia!).
    Sólo restaría preguntarle a los autores : ¿Y por casa cómo andamos?
    Y finalmente la declaración del escriba de haber hecho una “sincera autocrítica”, acoto que no veo la misma por ningún lado.
    Saléeee….

    Volta

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